"Disculpen las molestias que les vengo-venimos ocasionando... como veran no vengo con las manos vacías, les traigo este(a) dulce, paleta, gomitas, llaverito...", en fin muchos de nosotros nos hemos encontrado con alguien que se sube al pulcro y bien conducido transporte público de la Ciudad de México y Estado de México, siempre son tipos desgarbados, desaliñados, extravagantes y mal encarados con el distintivo acento de barrio y muchas veces con tono de voz amenazante, y yo siempre me he preguntado porque siempre dicen el mismo discurso, porque se empeñan en decir esa sarta de patrañas si lo que quieren es vender algo, porque no se suben, ofrecen, venden y se largan, sin decir ese patetico discurso que no hace más que alimentar la sospecha de que el dinero que obtengan será utilizado para drogas, alcohol, prostitutas o para detectar a sus posibles víctimas de robo, etc., o peor aun, es recurrente en Tlalnepantla, específicamente en Avenida Río Lerma, antes de cruzar la Vía Dr. Gustavo Baz, hay un tipo que se sube con tono amenazante a decir que es chofer de la ruta tal y que fue asaltado meses atrás y por esa razón anda armado y pide cooperación a los usuarios para seguir "cuidándonos", amenazando con la mirada sobre todo a adultos mayores, o señoras con niños, se me hace una verdadera burla, más aun cuando en el cruce mencionado hay policías de seguridad pública y tránsito del municipio que sirven para nada e incluso bromean con ellos, deberían de erradicar a esos vagabundos y delincuentes del transporte público, no hacen otra cosa que infundir miedo en la gente, ya son como una plaga, en promedio por viaje suben 2 o 3 de estos sujetos. No desconozco el estado de necesidad de muchas personas que tienen que hacer algo para comer, sin embargo, así no es la manera, repruebo terminantemente a estos sujetos que bien podrían trabajar en algo más productivo, NO SE USTEDES ¿QUE PIENSAN AL RESPECTO?