Cuando estaba haciendo mi servicio social, para mi titulación, lo que mas lleve en esa oficina fueron divorcios, por mutuo consentimiento y contenciosos, separación de personas, etc.     Llegaba un varón aquella mañana, por cierto muy preocupado y algo alterado, diciendo "me quiero divorciar lo mas pronto posible", pediéndole tomara calma y ofreciéndole un asiento y que me detallara su situación, me dijo,  "es que mi esposa se fue a Estados Unidos, ya que unas amistades le facilitaron el viaje y hospedaje allá y que ella ya instalada en un trabajo me iba a mandar dinero para mi viaje para alcanzarla en ese país extranjero y resulta que ya no me manda dinero y cada vez que le hablo por teléfono me evade a mis besos y frases de amor diciendo que soy un ridículo y es muy fría conmigo y resulta que fui con un dinero prestado y  ya llegando allá cual va siendo mi sorpresa, que la encontré con un tipo en su cama, y la golpie y el fulano salio corriendo y no lo alcance, y lo único que pude hacer es traerme a mi esposa y apenas y amaneció vine para acá, y es por eso que estamos aquí, para que nos divorcie en este momento....", a lo que me quede unos momentos pensando, y meditando que ese varón estaba sumamente alterado y le dije, ¿entonces ahí esta su esposa?, y me contesta " si allí esta la muy #%"#" ", a lo que le dije,  permitame hablar con ella por favor, ya que a usted ya lo escuche; la mujer entra con la cara muy pálida y le pregunto que como se sentía y tratanto de buscarle algún golpe en su cara o brazos, ella me contesta que se encontraba bien en su aspecto físico, pero en lo moral estaba deshecha ya que nunca hubiera hecho lo que hizo, ya que se encontraba sola sin apoyo moral y no lo hizo con premeditación ni siquiera lo planeo y estaba arrepentida y que ella no quería perder su matrimonio de 27 años de casados, que amaba a su esposo, y uno como abogado y psicólogo (solo por experiencias), se veía que decía la verdad.

Le dije que esperara afuera y que volviera a pasar su esposo, y volví a preguntarle que si en verdad estaba dispuesto a divorciarse, a lo que el asentó con firmeza, "claro, ya que mi dignidad de hombre a si lo requiere", y le pregunte, oiga aquí entre nos, ¿cuantas veces ha engañado usted a su esposa?, y como hombre, muy hombre dijo: "como unas cuatro si no mal recuerdo", y le vuelvo a preguntar ¿y su esposa se dio cuenta?, a lo que me respondió "creo que en una vez trato de disimular, y las otras veces no se dio cuenta, bueno eso creo ", y le digo¿ y usted no le puede perdonar una infidelidad a su esposa, por ser muy hombre?, ¿sus hijos no cuentan?, y unas jóvenes con bebes observaban para adentro de la oficina, eran sus hijas con sus nietos,  yo  le decía al varón,  ¿por ellos no pueden pensarlo detenidamente y reflexionar antes de divorciarse?..Pasaron 7 días y fueron a invitarme a su fiesta de reconciliación y lo habían pensado bien y hasta ahora me ven con agradecimiento. Yo creo que esos son los frutos de la profesión. Lo platique con un colega y me decía "se te fue una lana", pero yo no lo veo así, al contrario esas personas me ven con agrado y que la profesión de ser abogado es ser honesto en todo, y a mi me ha quedado esa satisfacción el haber evitado una ruptura familiar. No lo creen colegas.

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Autor: pastrana (Visita mi Oficina)