Robin Williams interpretó el palel de  "Andrew" un robot en una película que recoge el argumento que en 1976, escribió, Isaac Asimov acerca de un robot que poco a poco va asimilando el mundo de los humanos hasta desear ser reconocido como uno de ellos. Robot, viene de la palabra checa "robota" que evoca servidumbre o esclavitud.

Irónicamente, este relato, escrito por un brillante ateo, como Asimov (se puede ser tan necio para ser ateo, sin perder por eso erudicción intelectual), conduce a la conclusión inevitabe de que la naturaleza humana, busca el "mas allá". Después de colmar todos los deseos humanos posibles, "Andrew" desea envejecer, y finalmente morir.

En la hisoria, Andrew (robot) pide su libertad,  y se construye una casa y vive solo.

En 2048, Andrew Martin ve por última vez en su lecho de muerte a su ex-dueño. Richard se disculpa por desterrarlo mientras Andrew se despedía de él diciéndole que "era un honor servirle".

Andrew va en una búsqueda para localizar más robots de la serie NDR para descubrir si los demás también han desarrollado sensibilidad.

Después de años de fracaso se encuentra a Galatea, un robot NDR con atributos femeninos y de personalidad. Sin embargo, es solo su programación y no algo que ella haya desarrollado.

Galatea es propiedad de Rupert Burns, hijo del diseñador original del robot NDR. Burns, trabaja para crear una apariencia más humana para los robots, pero es incapaz de atraer fondos.

Andrew se compromete a financiar la investigación y los dos unen sus fuerzas para revolucionar la robótica. Andrew crea nuevos diseños de prótesis de órganos para robots que también pueden ser utilizados por los seres humanos.

Él se mantiene en contacto con "la Damita", que crece, se casa y se divorcia. Andrew finalmente vuelve a saludar a "la Damita" pero en realidad es su nieta Portia , un poco confundido la Damita le dice que se había ido 20 años y por eso no la reconocia. Con el tiempo, Andrew se convierte en humano suficiente para enamorarse de Portia, y en última instancia, ella con él.

Pasan lo años y Andrew va al hospital a ver a la Damita en su lecho de muerte y ve que ella lleva consigo el caballo que le habia tallado años atrás. Ella muere en silencio y Andrew siente el dolor de no ser capaz de llorar y se da cuenta que necesita tener expresiones.

A lo largo del siguiente siglo, Andrew acaba la conversión a ser humano y pide al congreso mundial que se le declare como ser humano con la intencion de estár legalmente casado con Portia, pero es rechazada; el Presidente del Congreso explica que la sociedad puede tolerar a una máquina eterna, pero sostiene que un ser humano inmortal crearía demasiados celos e ira para estar con otro ser humano y es declarado máquina ese día.

Andrew trabaja con Rupert (ahora un hombre viejo) para introducir la sangre a su sistema, lo que le permite envejecer y Rupert oficialmente le da la bienvenida a la condición humana, y comienza a envejecer junto a Portia. Andrew otra vez asiste al Congreso Mundial, ya como un hombre viejo, con la intención de nuevo de que se le declare un ser humano.

En su lecho de muerte, con Portia a su lado, Andrew alcanza a ver la de decisión del Congreso Mundial en la televisión: Andrew Martin es reconocido oficialmente como humano, y que aparte de "Matusalén y otros personajes bíblicos," era el ser humano más viejo en la historia a la edad de doscientos años. La Presidenta también valida el matrimonio entre Portia y Andrew.

Andrew muere mientras se escucha la emisión, y Portia ordena a su enfermera, Galatea (ahora como mitad humana), desconectar su máquina de soporte vital. La película termina con Portia en su lecho de muerte junto a Andrew, mientras le susurra "Hasta pronto".

Poco hay que agregar después de un "hasta pronto" escrito por un ateo, en el lecho de muerte.... La conversión del "robot" en humano, implicó la necesidad de ir al "mas allá"....

¿No sería esta una proyección de las más íntimas convicciones espirituales de Asimov... el famoso ateo que presidió la Asociación Humanista Estadounidense?

Despúes de todo, un hombre realmente inteligente, siempre termina por descubrir a Dios, aunque no siempre tenga el valor de reconocerlo expresamente.

Suerte a todos.

:)

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Autor: Maxwel Smart (Visita mi Oficina)